Después de las tormentas, la esperanza se consolida en Sucumbíos

Nueva Loja, 12 de Marzo de 2012- Sucumbíos Información.- Con la llegada de Monseñor Paolo Mietto empieza una nueva y feliz etapa en la peculiar historia de nuestro Vicariato.

Después del descamino que reinó en nuestra iglesia durante los últimos cuarenta años, sucede un terremoto inesperado: Sale Monseñor Gonzalo protestando ser una víctima, y llega un nuevo administrador con religiosos jóvenes y briosos… que serán, por su vez, nuevas víctimas. Se acaba la era de Isamis y comienza otra… que los de Isamis no dan oportunidad de plasmar.

En pocos meses el aire se irá oxigenando y la espiritualidad empieza a volver, pero de golpe nos sacan a los Carmelitas y a los Heraldos. Los primeros se van con disgusto, lo declararon. Los otros, resignados –creemos- al soplo de la obediencia, aunque tristes por dejar aquí fieles desolados.

La tensión va creciendo. Un Delegado Pontificio no logra contentar ni a unos ni a otros. Un Presidente y un gobierno tampoco colaboran para la estabilidad y la paz. No hablemos de los activistas contestatarios locales, clérigos y laicos ¡Qué triste situación! El tiempo iba corriendo…y nada sucedía. Parecía que habría una involución; la esperanza que radió un día, ¿iría a ser defraudada?

Resulta que no. Ahora vemos que se va a normalizar la vida cristiana en Sucumbíos, pues llega un administrador bueno y con experiencia, al que no le deseamos los dolores de cabeza que tuvo Monseñor Rafael. Monseñor Paolo Mietto inaugura su pastoreo con una Eucaristía solemne como nunca se vio en Sucumbíos (aunque nos recordó un poco las Misas cotidianas de los hermanos Heraldos) ¡hasta el Padre Pinos se puso casulla para la celebración! La presencia del Nuncio y de tantos Obispos nos hizo ver que somos parte de la Iglesia Católica y que ya no somos más una originalidad diferente, un supuesto “modelo” que se opone al Vaticano y que rompe la comunión eclesial. El nuevo administrador nos trae un mensaje de unión y de esperanza. Uff!

En fin, gracias sean dadas a Dios por la evangelización de los primeros Carmelitas, por las conquistas sociales de los segundos Carmelitas, por el renacer espiritual que vimos en el breve pero fecundo lapso de la administración de los Heraldos del Evangelio y por el rumbo seguro y la estabilidad que nos trae el nuevo Obispo.

Gracias María: Madre del Carmelo, Madre del Cisne, Madre de Fátima.

Gracias San José por el Pastor que nos mandas.

Gracias Diosito por nuestro Santo Padre el Papa, por el nuncio, por el nuevo Administrador, por los obispos del Ecuador y por nuestro pueblo católico a pesar de los pesares…

Después de tanto informar, aclarar, refutar y opinar “con oportunidad o sin ella”, según el consejo de San Pablo a Timoteo, nuestro blog se dispone a dejar definitivamente la arena de las redes sociales, ufano de sus centenas de despachos y de las casi 70.000 visitas de que fue objeto por espacio de diez meses. Valió la pena.

“Dolor y admiración ¿Qué pasa en Sucumbíos?” decíamos en uno de nuestros primeros artículos. Hoy, en parte por nuestra beligerancia, sabemos bien qué es lo que pasa en Sucumbíos; el dolor se mitigó y la admiración perdurará eternamente por el amor que nos prodiga el Señor, al permitir la prueba que nos prepara para la gloria. No es otro el camino cuaresmal.

¡Que viva nuestro sufrido, invicto y glorioso Vicariato de Sucumbíos!

http://sucumbiosinformacion.blogspot.com/
sucumbiosinformacion@gmail.com