martes, 6 de septiembre de 2011

Atención Roma - los "isamitas" continúan la guerra con Heraldos o sin Heraldos


Tiempos atrás el Blog de los “isamitas” quiso mostrar que estaba siendo intervenido por “hackers”, o gente por el estilo, que decían cosas desproporcionadas con lo que nos tenían acostumbrados, con la intención de desprestigiarlos delante de “autoridades” vaticanas, que ellos no aceptan!!!

Recordamos un escrito publicado en este mismo blog que llevaba por título “El burlador burlado”. Pero ahora parece que lo escrito, escrito ha sido por los propios de Isamis, pues han pasado varios días sin que haya sido publicado un desmentido o una corrección. Por tanto, los autores son los propios “isamitas”. ¡Y se muestran bien como ellos son!

¿Quién habrá sido el autor? – No lo sabemos. El blog de Isamis estuvo durante unos dos meses practicamente desactivado. Lo han puesto a “escupir” veneno nuevamente y nos parece que, de esta vez, se han quemado definitivamente.

El mal sólo hace daño cuando se quiere presentar como bien. Cuando al demonio se le ven los “cuernos y el rabo” pierde su atracción y causa rechazo. Sólo los Judas, los Herodes y los Caifás le siguen fielmente, pues ya habían hecho de antemano su elección.

Así nos parece la publicación hecha por los “isamitas”, publicada en su blog el pasado dia 2 de septiembre. Se trata de una reseña de las entrevistas que tuvieron los miembros de Isamis con el Delegado Pontificio, en funciones de Administrador por “obra y gracia del Nuncio y de los Obispos” (sin olvidar al gobierno, que parece ser quien manda, por medio de sus amenazas).

Mons. Sánchez se reúne sólo con el clero rebelde:
P. Edgar Pinos, P. Raúl Usca, P. Pablo Torres, P. Armando Olaya

Nos cuentan los “isamitas” que Monseñor Angel Polibio Sánchez, en reciente y rápida pasada por Nueva Loja, recibió dos representaciones de Isamis: una de la autotitulada “Asamblea Diocesana de Isamis” y otra de las entidades fantasma que se “agrupan” en las “asociaciones sociales de Sucumbíos”. Todo queda dentro de “casa”, pues los que no pertenecen al “isamis-carmelita” están impedidos de participar, de opinar y de votar.


Es una secta poco democrática y muy autoritaria

Que Mons. Polibio los reciba, esta dentro de sus funciones de Delegado-Administrador. Si sólo recibió a ellos, sería otro cantar. Pero imaginamos que se haya reunido también con los que son la mayoría de los católicos, y no quieren saber nada del Isamis, ni de todo el mal que ellos trajeron al Vicariato en los últimos 40 años.

¿Qué de bueno le contaron los “isamitas” a Mons. Polibio? Veamos lo que ellos mismos dicen: – “Para transmitirle sus preocupaciones ante el estancamiento en que se encuentran tanto el proceso de reconstrucción de la iglesia local como el proceso de reconciliación de la provincia”.

Según los “isamitas” todo esta parado. ¿Por qué? – “Estamos aquí monseñor para transmitirle nuestras preocupaciones antes de que viaje a Roma y presente su informe sobre la situación en la provincia”. Hasta aquí, primer párrafo, todo normal.

– “Echamos en falta tu presencia, y esta ausencia de autoridad nos afecta en lo pastoral, lo económico y lo administrativo, dijo el Padre Edgard Pinos a modo de introducción. Las cuatro pastorales fueron, una a una, detallando las dificultades y los vacios vividos en los últimos meses”. Ya podemos ir apreciando que los “isamitas” se siguen considerando los dueños de la situación, pero como no lo son, reclaman que la autoridad no los respalde como ellos querrían.

– “Durante las tres horas que duró el encuentro, la Asamblea repitió varias veces al Delegado Pontificio que la otra parte del conflicto, esto es, los nuevos sacerdotes nombrados; el personal de la administración de la Pastoral Social, así como aquellos seguidores de la renovación Carismática que continúan con sus protestas callejeras en Lago Agrio todos los días, no hacen intentos por reconciliar y por dialogar con los sacerdotes diocesanos o los miembros de Isamis. “Los que usted puso al frente –le indicaron– debían ser imparciales pero no ha sido así”, en alusión, entre otros, al abogado Danilo Ramírez”.

Las reclamaciones de los “isamitas” comienzan a ponerse más calientes. Nada de lo que el Delegado Pontificio ha hecho les gusta, porque ha procurado gente que no es “isamita”, y eso es contra la “iglesia diferente” que intentó implantar Fray Gonzalo. Como las procesiones diarias por el centro de Nueva Loja continuan pidiendo la vuelta de los misioneros del Papa, de los Heraldos del Evangelio, mostrando por enésima vez que el grupito de “isamis-carmelita” es minoritario y mantenido, hasta económicamente, por la estructura socio-política que se había montado, también hay que prohibirlas.

Y ahora van a darle palos al abogado Danilo Ramírez: – “Danilo Ramírez ejerce, desde el mes de mayo, como abogado para los asuntos del Vicariato –gracias a un poder otorgado por Sánchez-- y como abogado que lleva la acusación interpuesta por algunos miembros de los Heraldos del Evangelio contra unas veinte personas por “terrorismo organizado”. La Asamblea hizo notar al Delegado que esto es un claro conflicto de intereses, por no mencionar que éticamente es insostenible mantener ambas representaciones. El Delegado del Papa no lo ve así y no ve sospechosa dicha actuación”.

Ya comienzan los “isamitas” a considerarse árbitros y jueces, y quieren que todos bailen al compás de la música que ellos tocan.

– “No hay coordinación, manifestaron los representantes de la Asamblea Diocesana, y pusieron un ejemplo de ello: el padre Miguel Corral, en un gesto que divide y confronta, convocó una reunión paralela a la que celebrara Isamis; otro ejemplo: en el sector oeste de la ciudad, abrió una parroquia paralela a la del Divino Niño donde los nuevos sacerdotes celebran misa. “Le pedimos que actúe” porque el conflicto se ha reavivado en los últimos meses… La división pastoral es clarísima”.

El Padre Miguel Corral debe ser uno de los sacerdotes que han enviado al Vicariato para substituir a los misioneros Heraldos. Debía imaginarse que su responsabilidad y actividad era la que todo sacerdote tiene en la parroquia a donde le mandan. Pues los “isamitas” le dicen que esta equivocado; que alli los que mandan son los “isamitas”, y si él no les consulta antes de hacer cualquier cosa, le acusan de “dividir y confrontar”. Las mismas acusaciones que le hacían al Administrador Apostólico. ¡Por encima del Papa y del Administrador, mandan los “isamitas”!

La Parroquia “paralela” del Divino Niño, es el gimnasio o salón donde el Párroco Padre Mauricio Galarza, EP, se vió obligado a celebrar las Misas, porque un grupito de “isamitas” de esa zona de la ciudad decidió invadir el templo y no permitir que el párroco nombrado por el Administrador celebrase el culto divino. Pero los “isamitas”, que hasta ahora no han devuelto el templo, no son los que dividen. Son siempre los otros, sean los que sean. Ayer eran los Heraldos y el Administrador; hoy es el Padre Miguel y el Delegado Pontificio. ¡Quien manda sigue siendo Isamis!

Dejamos constancia de la afirmación: “el conflicto se ha reavivado” después de la salida de los misioneros Heraldos.
– “La Asamblea reiteró al Delegado que todas las quejas, vacíos y afrentas le han sido comunicadas a su debido tiempo en sucesivas cartas, así como la negativa a entregar los fondos que el Vicariato debería proveer para el buen funcionamiento de la vida pastoral. Sin embargo, Monseñor alegó que él desconocía muchos de estos detalles hasta el mismo día de la reunión a pesar de que la Asamblea tiene copia de todos los oficios enviados”.
El Delegado Pontificio habrá tenido que bailar en la cuerda floja, pues a pesar de saber que los “isamitas” mienten siempre, le quisieron colocar entre la “espada y la pared”. Lo que nos interesa marcar es la prepotencia y como siguen considerandose por encima de la autoridad.
– “En la reunión estaba un representante de la radio Sucumbíos, quien detalló los obstáculos que la nueva administración del Vicariato está poniendo. Entre ellos, la apertura de una cuenta bancaria paralela a la existente, la falta de autorización para la renovación de frecuencias, la falta de autorización para la compra de repuestos y la renovación de la patente, que no ha sido entregada al director de la radio y que resulta imprescindible para realizar diversos trámites; y le pidió explicaciones sobre la política de despidos que se ha puesto en marcha”.
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Se repiten los acontecimientos, siendo que ahora no les pueden echar la culpa a los misioneros Heraldos. Han pasado los meses y los propios “isamitas” reconocen que los problemas de la Radio Diocesana no fueron creados por el Administrador Apostólico (que se encuentra ahora en el exilio desde el día en que invadieron la Radio los “isamitas”), sino que son inherentes a su estructura “isamítica”. Y que el Delegado Pontificio quiere corregir.
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– “La falta de un mandato con mayores atribuciones para actuar y las ocupaciones en otras actividades fueron las razones aducidas por el Delegado, sin mencionar en ningún momento la palabra reconciliación, aunque está debería ser el centro de su responsabilidad y compromiso con la provincia”.
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En la boca de los “isamitas” están las palabras que habría dicho Mons. Polibio. Le acusan los “isamitas” de no haber hablado de “reconciliación” y le indican que esa es su responsabilidad.
Nos preguntamos, ¿qué entienden por “reconciliación” los “isamitas”? Y la respuesta salta de sus propias palabras:
– “En la tarde y con dos horas de retraso, monseñor Sánchez recibió en la Casa Diocesana a representantes de las organizaciones sociales, la mayoría mujeres. El diálogo, la réplica y contrarréplica y las palabras duras y directas sin tapujos marcaron la conversación. (NOTA del blog: Esta parece ser la “reconciliación” que los “isamitas” buscan)Monseñor Sánchez dejó el circunloquio a un lado y confesó abiertamente que: “Yo no les puedo responder si la denuncia [por terrorismo] va o no va”; “Yo no puedo impedir a Danilo [Danilo Ramírez, el abogado] el ejercicio de su profesión… No sé exactamente qué organismo me puede demostrar lo que él está haciendo mal [con el poder notarial]”.
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“Uno de los momentos más tensos se produjo cuando uno de los presentes le formuló la siguiente pregunta: “­¿Usted tiene voluntad para que la acusación por terrorismo desaparezca?” “Yo sí” –respondió tajante-. “Pues las organizaciones sociales pensamos que no”. Y acto seguido le mostraron con hechos que la única demanda que “se ha movido” es la que presentaron dos Heraldos con Danilo Ramírez como abogado. “Pídale a Danilo que permita sanar y reconciliar”.
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Palabras misteriosas estas de “sanar y reconciliar” en la boca de los “isamitas”. Por un lado la religiosa Hermana Gloria Martínez, “dando las ordenes a golpe de tambor”, realizó una “catarsis” con algunos “isamitas” para “sanación y curar heridas”. De otro lado, cuando terminó el “ayuno” de Fray Gonzalo en las calles de Quito, los “isamitas” trajeron a la ciudad de Nueva Loja algunos "indígenas Kitu Karas para realizar un proceso de reflexión encaminada sanar los corazones”, ceremonia llamada corazonar y que dura siete días".
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– “Monseñor Sánchez reconoció que “tengo personas que me están haciendo el juego”, en referencia al tema de los despidos en la Radio Sucumbíos. Y aseguró, como en la reunión con la Asamblea que desconocía muchos detalles de la situación actual. Las organizaciones le reclamaron que su cargo le obligaba a estar más atento al proceso”.
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Las “organizaciones”, que siguen siendo tan fantasmas y misteriosas como desde el inicio de este proceso, y nunca aparecen los nombres de sus fundadores y directivos, reclaman y exigen al Delegado que tiene que ser más responsable, y darse cuenta que tiene que apoyar a Isamis, si se quiere salir bien de este negocio. De lo contrario, le amenazan que le pasará lo que al anterior Administrador.
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– “Las organizaciones le pidieron al Delegado del Papa que interceda por el pueblo de Sucumbíos sin ambigüedades lo cual no entra en contradicción con la objetividad exigida a su mandato. “El Vaticano debe escuchar nuestra voz y ese es nuestro pedido”, dijeron las organizaciones para finalizar.
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Si el Delegado fuese a “interceder” por el “pueblo de Sucumbíos” la primera cosa que tendría que hacer es poner fuera de la Iglesia a esta secta fundada por Monseñor Fray Gonzalo, y dejar que el pueblo y las comunidades puedan practicar la religión católica sin la opresión de los “isamitas”. Y habrá triunfado la reconciliación entre los hijos de Dios.

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