1. Correa:Tras los fuertes rumores de días previos, en relación a las dos visitas del presidente Rafael Correa al Parque La Alameda de Quito, según los cuales el presidente le habría insistido a Mons. López Marañón para que continuara e intensificara publicitariamente el activismo de ayuno, mientras él, como presidente, expresaría públicamente lo contrario; ahora –tras la perseverancia testimonial del pueblo de Sucumbíos en Lago Agrio y el crecimiento de ésta con participación de población rural (a favor del papa y de sus decisiones)–, desde Quito corren rumores de que el presidente Correa está pasando a mostrar mucha preocupación. En este contexto, ya cuestionando la eficacia del ayuno de López Marañón y los probables efectos de tal actividad a terminar desembocando en tres ámbitos: Quito, Lago Agrio y Roma misma.
Al parecer, los objetivos primarios de la actividad de ayuno de López Marañón y la cobertura dada por medios del gobierno y por ONGs asociadas con la idea, no habrían funcionado, habiendo tenido un efecto solo en objetivos muy colaterales. Ello todo, sería motivo de mucha preocupación en el Palacio de Carondelet, pues, podría terminar constituyendo un enorme peligro para las intenciones iniciales del gobierno Correa, así como para la reputación de los carmelitas de ISAMIS y de similares “modelos de iglesia” en otras latitudes cercanas.
En este sentido, Correa estaría sugiriendo –ahora con sinceridad– suspender o modificar el activismo de las jornadas de ayuno en plaza pública de López Marañón.
2. Prudencia católica y apoyos inconvenientes:
Transcurridos cerca de 30 días de la filial entrega de la comisión misionera de los Heraldos del Evangelio al Santo Padre, relativa al Vicariato de San Miguel de Sucumbíos, las manifestaciones católicas, cívicas y religiosas a favor del papa y de su potestad, así como de la evangelización de los Heraldos, no cesan. Por el contrario, estas manifestaciones perseveran experimentando un crecimiento que destaca en el incremento –día a día– de población rural del vicariato, acompañando a la población urbana predominante de los primeros días.
Para la rebeldía de la cúpula carmelitana de ISAMIS y sus diocesanos asociados, este perseverante testimonial público y religioso en las calles de Lago Agrio es motivo de alta preocupación y lo es tanto como dos elementos adicionales y simultaneos que se han hecho “presentes” alrededor del activismo de López Marañón en Quito:
a) Uno es la elocuente prudencia de sus hermanos en el episcopado y/o de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana con respecto al ayuno de López Marañón. Pública prudencia que ha sabido no deslizar en estratagemas político-sociales (utilizando a un obispo emérito para fracturar la unidad episcopal ecuatoriana), evitando inconvenientes expresiones de solidaridad o de censura, y dejando así la libertad de que se pueda mesurar el calibre y longitud de los hilos en que realmente influye la ideología secular de los capitanes del Estado. Esta prudencia episcopal ha sido calificada como “silencio” por parte de los enemigos de la obediencia católica, con una vehemencia tal, que no solo estaría mostrando la contrariedad que sienten los asociados al activismo de ayuno de López Marañón sino también las verdaderas intenciones de semejante ayuno. Transcurridos unos cuantos días del activismo de ayuno, tanto es así la contrariedad como tanto se quejan de esa episcopal prudencia denominada injustamente por ellos de “silencio”, pues a oídos de muchos y hasta de ellos mismos que hoy tanto se quejan, no es sino elocuente prudencia.
b) Otro elemento simultaneo al anterior es “la calidad” de apoyo supuestamente “episcopal” recibido al ayuno de López Marañón, pues la rebeldía “isamita” se ha visto conminada a tener que jactarse de solidaridades demasiado heterodoxas de otras religiones y otros cultos nada católicos, de manera confusa, oculta y subrepticia, como por ejemplo de: Higinio Alas Gómez, pastor de la iglesia apostólica reformada(proveniente de una “Conferencia Ecuménica Latinoamericana”); Luís Quintanilla, de laiglesia apostólica salvadoreña; Juan Carlos Urquhart de Barros, de la iglesia episcopal antigua; entre otras solidaridades similares de sectas y sus típicos lenguajes anti-católicos.
3. Sintomático: ¿Berdonces buscando apoyo fuori le mura del CELAM?
El fraile carmelita de ISAMIS, Juan Berdonces, está en Zaragoza buscando apoyo al “modelo de iglesia” ISAMIS o explicando lo inexplicable en Europa, y lo hace repitiendo mentiras y conjeturas propagandísticas ya claramente desmentidas con suficiente difusión.¿Será desespero o Berdonces estima que la audiencia española es capaz de informarse de la misma manera que la población de una aldea en el río Aguarico abajo?
Pero no seamos tan críticos, quizá, Berdonces simplemente ha sido comisionado a tratar de no perder unos ingresos provenientes de Zaragoza y para ello solo siente que debe dar “fe de vida” del chiringuito ecuatoriano al que se dedicaba. Pero, de no ser “tan” así…
¿Y, a estas “alturas”, será que pocos eclesiásticos hay quienes preparen a una conferencia a un fraile de ISAMIS en América Latina para que lo explique? Independientemente de que haya o no haya eclesiásticos dispuestos a ello, lo importante sería –en tal caso– saber porqué.
4. Audaz y elocuente disyuntiva:
El día 7 de junio (hace solo 4 días y a 15 días de iniciado el activismo de López Marañón en Quito), los carmelitas “isamitas” se hicieron eco de un comunicado de la asociación,“Comunidades de Vida Religiosa de Sucumbíos” (conformado por algunos religiosos y religiosas de la Iglesia), en que ya comienzan a surgir imputaciones específicas contra obispos del Ecuador:
“Nos duele especialmente la postura de Mons. Arregui ante los medios de comunicación. Su palabra de autoridad debiera ser usadaparaun reconocimiento humilde de las equivocaciones de nuestra Iglesia y no para alentar debates y posicionamientos que son una cortina de humo frente a lo que realmente está pasando.”http://isamis2010.blogspot.com/2011/06/de-la-vr-de-sucumbios.html
Grave imputación y eco de disyuntiva que podrían lucir, entre otras hipótesis, como un elocuente intento de sembrar y/o despertar la desunión en el episcopado del Ecuador.
¿Entonces, dónde habrá quedado la queja “isamita” sobre el “silencio” de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana? ¿O será pura incoherencia y no más?
5. Susto y preparación entre progresistas:
La noticia indica que:
“Los carismáticos de la provincia preparan una gran marcha para el Domingo de Pentecostés donde insistirán en el regreso de los Heraldos. Monseñor Gonzalo López Marañón mantiene su decisión de continuar el ayuno si las iniciativas de paz que dieron inicio esta semana no prosperan.”
Los carmelitas “isamitas” convocaron para hoy:
“(…) una acampada juvenil en el Parque del Ayuno con el fin de apoyar la medida adoptada por el Obispo. A través de Facebook, las y los jóvenes católicos están convocando a la vigilia que comenzará el sábado a las 5 de la tarde y concluirá el domingo. Un sleeping, comida para compartir y una Biblia es todo lo que deben llevar al Parque La Alameda de Quito. Desde Argentina, grupos de comunidades de base juveniles realizará su propia vigilia, en sintonía con la de Quito.”
Y el “isamismo” reacciona así:
“Hay una invitación para que el Obispo regrese a Sucumbíos y participe en las fiestas del próximo 20 de junio.”
¡Y habrá que observar bien, pues luce que en la inquietud gonzalista hay susto, preparación, reacción y ánimos de “movida”!
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