domingo, 26 de junio de 2011

39 días de procesiones en apoyo a los Heraldos del Evangelio

Nueva Loja, 25 de junio de 2011- Sucumbíos Información.- Hoy se cumplen 39 días de procesiones diarias ininterrumpidas en provincia de Sucumbíos, tomando en cuenta que los domingos hay dos, una en la mañana y otra en la noche, es decir ya van 45 procesiones, donde asisten cientos y hasta miles de personas, pidiendo por la paz , que se respete al Papa Benedicto XVI y al Administrador Apostólico, Mons. Rafael Ibarguren, y que regrese la congregación Heraldos del Evangelio a Sucumbíos.



Nos pareció oportuno destacar un reportaje realizado por un medio informativo local de Lago Agrio, se trata de la Revista Eclosión Amazónica. Es bueno saber la apreciación de los medios locales de la provincia, porque lamentablemente los corresponsales en Sucumbíos de muchos medios de comunicación nacionales e internacionales son agentes isamitas, éstos han divulgados muchas noticias parcializadas y orientadas, y lo que es peor, noticias deformadas y mentirosas, empezando por radio Sucumbíos y terminando por el Sr. Víctor Gómez (conocido por realizar actos contrarios a la ética profesional del periodismo) corresponsal del Diario El Universo.

A continuación el reportaje:

Piden regreso de los Heraldos del Evangelio a Sucumbíos

Reportaje: Apoyo a los Heraldos y rechazo a Carmelitas y Diocesanos

Como de costumbre todas las noches, después de la salida forzosa de los Heraldos del Evangelio, moradores de Lago Agrio, se toman las calles para marchar por su retorno y la expulsión definitiva de los Diocesanos  de la línea de Carmelitas, que protagonizaron la toma de la catedral, en resistencia al cese de su mandato.

A la caravana se suman personas de varias parroquias y comunidades del cantón, que aducen haber sido engañadas por radio Sucumbíos, propiedad de Isamis.

El apoyo a los Caballeros de la Virgen es unánime, principalmente por la población urbana que anhela la despolitización de la iglesia, para dar paso a una verdadera evangelización desde la línea de los Heraldos.

Las pancartas que portan los manifestantes tienen mensajes de rechazo a la administración pasada, que ha dejado mucho que desear luego de los actos violentos que llevaron a cabo por defender sus intereses enraizados durante 40 años en la provincia de Sucumbíos.

“¡Basta! 40 años son suficientes, Santo Padre, gracias por enviarnos verdaderos sacerdotes, somos la iglesia de Cristo, no un partido político, exigimos respeto”; “hermanos unámonos para salvar la verdadera iglesia”, “Heraldos amigos Sucumbíos está contigo”, “queremos a los Heraldos”.


Miles de manifestantes marchan pacíficamente con globos y banderas blancas y amarillas, color de la provincia, escoltados por la Policía para resguardar el orden, mientras al costado la población observa un poco impaciente, por el problema suscitado, que ha hecho que la fe se vea dividida, así mismo las críticas contra los curas rebeldes (Carmelitas y Diocesanos), es el pan de todos los días de boca del colectivo, convencido que el levantamiento es por defender intereses económicos y políticos de un grupo de familias de Lago Agrio, que manejaban la fe a su antojo.

El pedido de regreso de los Heraldos, se divisa en los mensajes que su paso deja observar el recorrido que inicia a partir de las 7 de la noche desde las instalaciones del Banco Nacional de Fomento, “la luz de cada una de las velas que aquí portamos, es la esperanza del cambio en la iglesia”, dijo una participante de la caminata. Mientras el característico MAZDA color verde, portando el altoparlante, en una sola voz enfatiza “Queremos un nuevo modelo de iglesia, abajo la iglesia corrupta y politizada, queremos el retorno de los Heraldos, súmate pueblo”.



Heridas abiertas 

El tema ha sembrado heridas difícil de cicatrizar en los feligreses, que defienden por separado su postura religiosa, sin tomar en cuenta la verdadera doctrina de Jesús, que murió en la cruz por el pecado de la humanidad. 

Los curas alzados que armaron todo un escándalo, que demostraron el odio, que empuñaron palos y piedras, y que estuvieron al servicio de la política, son los mismos que hoy siguen hablando de amor y perdón al prójimo, con sus manos cogen la ostia y en nombre del padre y del hijo, intentan hacer creer la veracidad de su palabra. No obstante es fácil darse cuenta en la gente, que ellos ya perdieron la credibilidad.      

Genoveva Altamirado, del comité de defensa de los Heraldos, se muestra preocupada por el golpe sufrido a la fe de los católicos, por parte de sacerdotes Diocesanos y Camelitas, a quienes les dijo “no deberían dar cara en la misa”.

El 11 de junio el Movimiento de Renovación Carismática Católica, resolvió “Respetar la jerarquía de la iglesia y autoridad del Santo Padre, al nombramiento de la nueva administración apostólica de ISAMIS en octubre del año pasado, al padre Rafael Ibarguren de la congregación Heraldos del Evangelio.

Por el regreso de los Heraldos hasta las últimas consecuencias 

Si bien se dio la salida de los Carmelitas, no así de los Diocesanos que aún se mantienen en Isamis, por lo que se pide su salida definitiva, sostuvo Altamirano. Para ella los Heraldos  no han cometido ninguna inmoralidad, ellos fueron enviados por  mandato de la Santa Sede a trabajar por la fe, por tal razon está dispuetos a jugarse las últimas consecuencias, con el fin de conseguir el regreso de los  Heraldos a Sucumbíos, en quienes vieron la real evangelizacion. “Nuestra iglesia ya lleva  más de dos mil años desde que llegó nuestro señor Jesucristo y no como los 40 años de monseñor Gonzalo López Marañón, donde ellos tiene  sus propios  santos y leyes”, expresó.

El retorno de los sacerdotes, solo depende del Santo Papa, quien hasta el momento no ha dado marcha atrás en el nombramiento de Ibarguren. De allí que no se puede hablar de una expulsión sino simplemente de una salida provisional, sentenció la delegada de prensa, de la Renovación Carismática.


El ex-obispo, se opone al retorno de los Heraldos y defiende su trabajo.

Mientras en Lago Agrio no se vislumbra una solución al enfrentamiento religioso, el ex-obispo sigue en el ayuno progresivo por la reconciliación de Sucumbíos, sin embargo su posición está condicionada a dejar el anterior sistema de iglesia y a no permitir el regreso de los Heraldos a la provincia amazónica; al menos eso es lo que ha pedido a la gente, “no hablar del arribo de los Caballeros de la Virgen”. 



Para que su ayuno concluya, Marañón quiere señales concretas de reconciliación. Por ejemplo, que no se repitan más las agresiones verbales dirigidas contra el clero diocesano y las comunidades eclesiales de base; que no haya exigencias de expulsión del clero diocesano, ni manifestaciones de regreso de los Heraldos


El Presidente Rafael Correa, que lo ha visitado al místico en varias ocasiones, le ha pedido que levante el ayuno y que respete la decisión de la Santa Sede.


Por Fernando Chumaña. Redacción Lago Agrio.


No hay comentarios:

Publicar un comentario